Autor: José Vicente de los Mozos, presidente de ANFAC
Esta tribuna se publicó en Expansión el 10 de abril de 2021

La automoción española se enfrenta al mayor reto de su historia: la transición hacia la descarbonización y electrificación del parque automovilístico. Un desafío que requiere del esfuerzo y la cooperación de toda la sociedad española. Desde la Unión Europea se han definido unos objetivos muy ambiciosos que marcan el año 2050 como fecha límite para alcanzar las cero emisiones netas en el transporte, y la automoción en España no va a renunciar a su parte de responsabilidad. Al contrario, estamos demostrando que somos los impulsores de este cambio, yendo incluso más allá de lo que permite el actual entorno.

El compromiso de la automoción es firme. Llevamos años preparándonos para este cambio, invirtiendo más de 2.700 millones de euros anuales desde hace cinco años en la transición de nuestras plantas y lanzando nuevos modelos al mercado cada año. Hace 10 años sólo se comercializaban 25 modelos entre híbridos y electrificados en España. Hoy en día hay a la venta 153 modelos electrificados y 125 híbridos convencionales. La progresión es igualmente exponencial en cuanto a producción. En 2021, se van a producir en España 14 modelos electrificados, y la fabricación, en unidades, se ha multiplicado por más de tres en menos de un año.

La oferta es sólida. Ahora necesitamos que la demanda también lo sea. Los vehículos electrificados son productos dotados de una tecnología de vanguardia, lo que se refleja en una diferencia de precio. Esto, unido a la escasez de infraestructuras de recarga pública, dificulta su crecimiento. Para continuar avanzando hacia la electrificación, necesitamos planes de impulso que incrementen la demanda, como el Moves III. Son, sin duda, imprescindibles, porque los compromisos regulatorios exigen apoyos concretos. El aumento de fondos del Moves III y su continuidad en el tiempo son buenas noticias. Celebramos este plan porque va a suponer un respaldo necesario a las matriculaciones de vehículos electrificados en un año muy difícil para el mercado automovilístico.

«Los compromisos regulatorios exigen apoyos concretos. El aumento de fondos del Moves III y su continuidad en el tiempo son buenas noticias»

José Vicente de los Mozos – Presidente de ANFAC

En 2030, el vehículo eléctrico debe alcanzar en matriculaciones, desde el 5% actual, una cuota de mercado del 40%, 540.000 unidades anuales para ese año. Si conseguimos esta progresión, llegaremos al objetivo de los 3 millones de turismos electrificados circulando en España en 2030, como dice el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima. Tenemos y tendremos producto suficiente para lograrlo, pero esa oferta ha de estar acompañada por otras medidas de carácter estructural. Los fondos del plan Moves son condición necesaria, pero no suficiente. Entre estas medidas prioritarias es muy relevante que el Moves III se acompañe de modo urgente de un programa similar para los vehículos pesados.

Impulsar la recarga

Es fundamental también empujar la recarga. El impulso económico del Moves III a la infraestructura de recarga eléctrica es, de nuevo, una muy buena noticia. En paralelo, este esfuerzo deberá acompañarse de otro conjunto de medidas que reduzcan la burocracia, agilicen los plazos y hagan más segura la apuesta del consumidor. Desde Anfac consideramos conveniente establecer objetivos vinculantes de instalación de puntos a corto y medio plazo, así como una estructura de reparto por el país en función de su desarrollo y necesidades, para que no se concentre sólo en grandes urbes. Y, por último, se necesita un mecanismo de seguimiento, un organismo, podría ser el IDAE, que monitorice y garantice el cumplimiento de los objetivos de instalación.

Para que estas medidas ganen en eficacia deberían acompañarse con una fiscalidad favorable a los vehículos electrificados. Mientras continuamos defendiendo en Europa la reducción del IVA a estos automóviles, podemos introducir bonificaciones y exenciones en nuestros impuestos estatales que favorezcan estas compras y refuercen así el impacto positivo del Moves.

«Para que estas medidas ganen en eficacia deberían acompañarse con una fiscalidad favorable a los vehículos electrificados»

José Vicente de los Mozos – Presidente de ANFAC

La automoción es el tesoro industrial de nuestro país. Somos el segundo fabricante a nivel europeo y el octavo a nivel mundial. Pero, mirado en su conjunto, es un sector con un gran potencial, que supone el 10% del PIB español, genera cerca de dos millones de empleos y aporta a la balanza comercial de España un saldo positivo de 17.000 millones de euros. En nuestras manos está mantener el empleo y la riqueza que aporta el sector. Nuestro país goza de todo lo necesario para alzarse como un referente mundial en la nueva movilidad. Tenemos un plan, tenemos una estrategia. Aprovechemos esta oportunidad.

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