- Las matriculaciones de turismos y todoterrenos sufrieron un grave descenso en el mes de abril con un 96,5% menos, hasta las 4.163 unidades.
- Las matriculaciones de vehículos comerciales ligeros registraron una importante caída del 91% respecto del mismo mes de 2019, hasta las 1.822 unidades.
- Los vehículos industriales, autobuses, autocares y microbuses cierran el mes de abril con una reducción de las ventas del 55%.
Madrid, 4 de mayo de 2020. El mes de abril se ha saldado con la peor cifra de matriculaciones de los últimos 20 años. Nunca en la historia reciente de las ventas de vehículos en el país se había registrado una cifra tan baja de venta de turismos, pero tampoco se había experimentado, en todo el siglo XXI, una crisis humanitaria y social del calado de la pandemia del coronavirus. Los concesionarios han cerrado durante todo el mes de abril y las escasas matriculaciones registradas responden a compromisos previos que se han hecho efectivos en las últimas semanas. La apertura en los próximos días de los concesionarios, con cita previa y los más estrictos protocolos sanitarios y de seguridad para clientes y trabajadores, permitirá registrar más entrega más en mayo, si bien las ventas no comenzarán a recuperarse hasta después del verano y siempre con cifras inferiores a las registradas en 2019.
Las matriculaciones de turismos y todoterrenos en abril se quedaron en 4.163 unidades, un 96,5% menos que en el mismo mes del año anterior, con los mismos días laborables en 2020. El canal más afectado es el de particulares, que solo registra 823 entregas, al tener totalmente limitadas las actividades de venta física para estos clientes. Las empresas también reducen radicalmente sus entregas, en un 97,3%. En el acumulado del cuatrimestre, las ventas caen un 49%.
VEHÍCULOS COMERCIALES LIGEROS
En abril, se han matriculado 1.822 vehículos comerciales ligeros, un 91% menos que en el mismo mes del año pasado, lo que supone un importante descenso del 49,1% en el acumulado del año, con 38.106 unidades. El descenso de matriculaciones a causa de la crisis del coronavirus ha afectado a todos los canales que han visto reducidas sus ventas, especialmente el de autónomos con una caída del 95%, y 318 unidades matriculadas.
INDUSTRIALES Y AUTOBUSES
Las matriculaciones de vehículos industriales, autobuses, autocares y microbuses se redujeron un 54,9% durante abril, con 905 unidades, y sumando una caída del 26,2% en los cuatro primeros meses del año, con un total 6.642 vehículos matriculados. Los vehículos industriales han caído un 49,9% durante este último mes. Por su parte, los autobuses, autocares y microbuses han tenido la misma tendencia que el resto del mercado con un decrecimiento en el cuarto mes del 82% y 57 unidades matriculadas.
DECLARACIONES
Noemi Navas, directora de comunicación de ANFAC, señaló que “el mes de abril de 2020 se quedará en la memoria como el peor registro de matriculaciones, pero esperamos que sea un caso aislado, provocado por las restricciones de actividad y movimientos del estado de alarma. La apertura progresiva de todos los canales de venta durante el mes de mayo, que se hará con todas las medidas sanitarias y de seguridad, ha de ir necesariamente acompañada con un plan de estímulo de la demanda fuerte que ayude a los consumidores que necesiten o quieran cambiar de coche, a optar entre la gama actual de vehículos nuevos que cuentan todos con los más altos estándares ambientales, de seguridad y eficiencia. De no tomarse medidas el parque automovilístico se deteriorará aún más por efecto de esta crisis, por lo que se debe incentivar la sustitución y baja de los vehículos más antiguos y contaminantes impulsando las entregas de vehículos eficientes y más seguros. En la movilidad postCovid19 el uso del vehículo privado, en muchas ocasiones, va a ser el medio preferente para los desplazamientos, por lo que es si cabe más importante ahora que nunca que sean los automóviles más avanzados y menos contaminantes los que ganen peso en este nuevo entorno. El sector de la automoción necesita de un plan de choque nacional urgente con medidas específicas para estimular la demanda y mantener la industria y hay que ponerlo en marcha cuanto antes. Es urgente disponer de estas medidas”.
Raúl Morales, director de comunicación de Faconauto, indica que “No por esperada es menos preocupante la mayor caída del mercado de la historia. La apertura de los concesionarios el día 11 de mayo reactivará de nuevo el sector, pero esperamos una evolución muy lenta de las matriculaciones, que no podemos permitirnos, porque sabemos del impacto que unas ventas de coches bajas tienen sobre la economía, el empleo o la confianza del consumidor. Tenemos que reactivar la demanda desde este arranque, y el sector pondrá de su parte, pero esta situación excepcional requiere de un impulso desde las Administraciones con medidas ágiles y de fácil aplicación que tendrían efectos visibles y que paliarían esta tendencia. Es la compra de vehículos que hacen las familias y las empresas las que impulsan el resto del sector, y eso es lo que debemos salvaguardar. De lo contrario, veremos cómo las matriculaciones se acercan a las 700.000 unidades este año, que podría ser también el peor de los últimos veinte años si no tomamos medidas ya”.
Según la directora de Comunicación de Ganvam, Tania Puche, “estamos ante el mes horribilis de la automoción española. En todo abril se ha matriculado lo que antes del confinamiento se matriculaba en un solo día; un dato que no por esperado deja de ser preocupante, sobre todo, si tenemos en cuenta que la vuelta a la actividad comercial, que puede hacerse desde hoy con cita previa y cumpliendo con las medidas de seguridad y los protocolos sanitarios, no va a suponer la recuperación inmediata del mercado y esto es mala noticia por la relación directa que tiene este sector con el PIB y la tasa de paro. Hay que poner en marcha de manera urgente medidas orientadas a insuflar confianza en el consumo para amortiguar un batacazo histórico del 9% de la economía. Es imprescindible un pacto entre Estado y empresas para proteger de forma eficaz los puestos de trabajo y evitar llegar a esa tasa de desempleo del 19% en 2020 y por supuesto, un plan de incentivo que no solo apoye al eléctrico para que también los compradores con los presupuestos menos holgados puedan acceder a un vehículo. Está demostrado que por cada millón que se invierte en el automóvil se recupera casi el doble a través de los impuestos, por lo que estamos hablando de una inversión rentable, máxime cuando con lo que aporta este sector al Estado se puede cubrir casi la mitad del gasto público sanitario”.